viernes, 28 de enero de 2011

Ishtar

Ishtar es realmente una mujer compasiva, una sacerdotisa, y está hecha para el amor. Se la asocia con lo celeste, y no con lo terrenal; en realidad, ella no tiene mucho que ver con la tierra y con la madre, es más bien una inspiración, una musa de las ideas y del cielo. Pero entonces, ¿su compasión, de dónde viene? ¿Es la compasión una forma de amar? No sé, ella ama con el ser y con el cuerpo, pero su amor es contemplativo, en verdad. Le sigue seduciendo el plano de las ideas y de lo sensible. Dejadla que ame como quiera, y el amor compasivo es el más puro que existe.

Lo que sí está claro es que ha encontrado el amor porque lo ha buscado, lo ha llamado, no se ha quedado sentada, y sigue con él porque él ha respondido.

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