Antes, con la ley del divorcio, cuando esta nació en el 85, la infidelidad o el abandono de familia, eran causas de separación, y era necesario alegar una causa además para poder acceder a ella. Pero hoy dia con el divorcio expres pues lo que tenemos es una locura. De repente lo habíamos moralizado todo, y ahora parece que la moral pesa en la Ley, y que no queremos cargar con ningun tipo de conciencia, sobre todo el juez que se exime de estos juicios morales. La verdad es que hemos ido de un extremo al otro.
Por otra parte, el aduterio de la mujer estaba anteriormente a la democracia castigado y ademas mucho mas penalizado que en el hombre, para cometer delito tenía que haber concubinato, es decir, apariencia y notoriedad del delito, que no lo ocultaba, pero si el hombre ocultaba su delito, nadie podía acusarle aun cuando tuviese algun indicio de prueba, esto no pasaba con el adulterio de la mujer, que solo bastaba un indicio para acusarle, sobre todo eran delitos perseguibles de oficio, que también servía el oerdon del ofendido. Entonces por lo menos había un sistema moral, era injusto porque había discriminación de la mujer; pero ahora hemos pasado a un sistema completamente radical, donde la mujer es la que parece que puede con todo, con la casa, con los hijos, con la pensión de manutención, con el trabajo dentro y fuera de casa, y encima con la infidelidad notoria, a esto es a lo que hemos llegado.
Hemos hecho de la mujer, para descargarnos de nuestras conciencias masculinas, otro hombrecito que repite la misma película, eso es lo que hemos hecho; y esto es monstruoso, el que tengamos que vivir estas experiencias, repitiendo el modelo patriarcal. Así que estoy enfadada también, pero feliz al mismo tiempo de ver que hay un hombre que es bueno, y que se puede decir que es bueno, hasta que uno empiece a desconfíar, pero no hay motivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario